sábado, 10 de julio de 2010

Carta a Dios 2º parte

Querido Dios:

Hace un tiempo que te escribí y me ayudaste a resolver algunas de mis preguntas; sin embargo, en esta carta quisiera  volver a rogarte por aquellos que lo están pasando mal en estos tiempos tan duros que corren y por los haitianos que parecer ser que nos hemos ''olvidado'' de lo que ocurrió y que siguen sin cosas tan necesarias como alimentos y medicinas.

Por todo ello, quisiera decirte que les ayudes y nos ayudes a nosotros mismos para que sigamos ayudando y no nos olvidemos de un pueblo que necesita tanto de todos y de Tí.Quisiera saber también porqué existen tantas personas que con tal de alcanzar una meta o cualquier cosa son capaces de pisotear y destruir a todas las personas que encuentran en su camino,el porqué de tanta hipocresía y falsedad,de mentiras y engaños y demás aspectos que vemos diariamiente.


¿Porqué existe tanta injusticia en un Estado de Derecho?, ¿porqué tantas familias tienen que ver cómo los delincuentes que asesinan o abusan de sus hijos están en la calle en un tiempo récord o cómo los que roban dinero público pagan con ese dinero para eludir la cárcel? ¿Acaso queremos eso Dios mío? ,¿qué ejemplo estamos dando si no se cumple lo que un día nos dejaste?


O  ¿porqué tenemos que seguir escuchando tantas muertes por maltrato? ¿CUANDO VA A ACABAR TODO ESTO Dios?

Yo creo en tu Iglesia,en tu palabra; como diría la canción:''creo en ese Jesús humilde que un día murió en un madero por todos nosotros''


Así pues sólo pedirte de nuevo  que ayudes a los que necesitan de Tí Señor.

TE QUIERE

María Sánchez Peña.

1 comentario:

  1. Completamente de acuerdo con todo. Y ahora entiendo lo que me has comentado. La parte que has amputado a esta carta, es precisamente la parte mas importante, la mas verdadera, todas esas preguntas que hacías, deberían alguna vez ser contestadas. Pero has hecho bien, María, complicaciones las justas y mas aun con personas que le duelen la verdad, o mejor dicho, le ofende la realidad.
    Me ha gustado mucho la carta.
    Un besazo

    ResponderEliminar